May 12, 2023
La lucha de Colombia contra la minería ilegal frustra a los grupos armados organizados
El gobierno colombiano ha mantenido su promesa de frenar enérgicamente la
El gobierno colombiano ha mantenido su compromiso de frenar contundentemente la minería ilegal que realizan los grupos armados organizados, causando daños irreparables al medio ambiente.
Los resultados son reveladores. Por ejemplo, el 10 de mayo, la Policía Nacional reportó la destrucción de 32 unidades productivas mineras en Tutendo, Certegui y Río Quito, departamento del Chocó, valoradas en $2,8 millones. Estas máquinas no solo son una inversión costosa para los grupos criminales, sino que también requieren una coordinación meticulosa para pasarlas de contrabando a los lugares de operaciones mineras.
A finales de marzo, la Marina informó que en un operativo conjunto en Buenaventura, departamento del Valle del Cauca, también fueron destruidas dos unidades de producción minera por un valor superior a los $21.000, poniendo fin a las operaciones mineras criminales en esa zona.
El 7 de marzo, esta vez en el departamento de Antioquia, el gobierno reportó la destrucción de una importante cantidad de maquinaria y materiales utilizados en la minería ilegal, sin brindar datos exactos. Días antes, también en Antioquia, las autoridades reportaron la destrucción de 40 minas ilegales.
Según datos del Ministerio de Defensa, entre principios de agosto de 2022 y principios de febrero de 2023, las fuerzas de seguridad colombianas intervinieron en cerca de 1.000 minas ilegales, incautando y luego destruyendo cientos de maquinarias y equipos para la extracción ilegal, como retroexcavadoras, dragas, bombas, motores, así como la incautación de grandes cantidades de insumos líquidos y sólidos, informó el sitio de noticias colombiano Portafolio.
“Los grupos armados del Clan del Golfo son los que tienen presencia en estas zonas y lucran con el daño ambiental que se genera en estas zonas”, dijo el Mayor de Infantería de Marina de Colombia Johann Guzmán, comandante del Batallón de Infantería de Marina No. 21, dijo a Diálogo.
Según el Mayor Guzmán, los grupos delictivos emplean a los habitantes de estas zonas, quienes bajo presión trabajan en las minas con la maquinaria suministrada. “Obviamente son trabajos bajo la dirección de estos grupos porque al final son ellos los que lucran y recogen el oro que se extrae”, agregó el May. Guzmán.
La minería ilegal de oro ha estado plagando durante mucho tiempo a Colombia, sus ecosistemas y comunidades, y aunque el país prohibió el uso de mercurio en la minería en 2018, el metal altamente tóxico continúa siendo ampliamente utilizado durante el proceso de extracción de oro.
Además, “el uso de maquinaria sin ningún tipo de control en estas áreas, genera deforestación y afecta las fuentes de agua, porque los vertidos de químicos como el cianuro y el mercurio, que se utilizan para procesar este tipo de materiales, contaminan los ríos”, dijo el Maj. dijo Guzmán. “Esto daña las riberas y los ríos a los que también desembocan, afectando directamente a las comunidades que viven en estas riberas, y esto se evidencia en las enfermedades que padecen las personas que consumen esta agua contaminada”.
Para los grupos armados, la minería ilegal es un negocio más lucrativo que el narcotráfico. “Comparado con el negocio ilícito de la cocaína, donde el kilogramo de coca puede estar en el mercado colombiano por alrededor de $1.075, el kilogramo de oro ilegal está en el orden de los $5.300, lo que ha hecho que este negocio se dispare; y hoy está contaminando [el ambiental] de manera crítica”, dijo el Contralor Delegado de Medio Ambiente, Gabriel Adolfo Jurado, al presentar un resumen de las actividades de su organismo a fines de julio de 2022.
Según datos de la Armada, a lo largo de 2022 y hasta fines de abril de 2023, las autoridades capturaron a 82 personas involucradas en la minería ilegal e incautaron 11.438 kg de metales, entre ellos 454 kg de oro, 54,2 kg de mercurio, 2.142 kg de estaño, 8.777 kg de coltán y 10 kg de cobre.